Originario de Eurasia y el norte de África, es el ave más común de ver en todas las ciudades y pueblos de Argentina, pero no se lo encuentra en zonas deshabitadas como el chingolo. Mide unos 14 cm y el macho (derecha) posee un babero negro y un collar nucal de color ladrillo, mientras que la hembra (izquierda) carece de ellos y presenta una gruesa ceja clara. Es prácticamente omnívoro, ya que se alimenta de semillas, insectos, artrópodos, escarabajos, y desperdicios orgánicos. Nidifica en todo tipo de huecos y pone hasta 5 huevos de color blanco, crema con manchas rosadas, o verdosos.